Allí llegan los vecinos con sus mascotas. Siempre hay algún problema por el que acudir. Desde un erizo que llenó de púas a dos perros hasta la vacunación antirrábica, pasando por las castraciones. Está ahí, cerca del puente Zaimán en la avenida Llamosas. También hay adopciones.
Negrita es una perra de aproximadamente tres años, y fue mamá de cinco cachorros hace algunas semanas. Vive con su compañero perruno Boca Negra, y con su dueño, Manuel Barrios, en el Barrio A4 de la ciudad de Posadas. Esta mamá cuida y protege a sus pequeños, incluso si eso implica poner en riesgo su propia vida, pues sucede que en el trascurso de la madrugada, un inesperado visitante fue a entrometerse en su territorio: un erizo misionero.
La naturaleza es sabia, y cuando se trata sobre el instinto materno canino, las perras harán todo lo necesario por sus cachorritos. Desde los primeros momentos de la preñez, las perras saben que deben protegerse, alimentarse y buscar refugio; y desde el nacimiento de los cachorros, con cariño y dedicación los protegen, alimentan, limpian y resguardan.
Frente a la intromisión del erizo, la perra siguió su instinto materno y no dudó en ahuyentar al invasor, para alejarlo de sus crías. Pero, el erizo hizo su parte y se defendió, expulsando sus púas, las cuales se insertaron en el cuerpo y cabeza de la perra. Ante tal situación, Boca Negra se asomó en defensa de su amiga, y resultó alcanzado por varias púas también.
El erizo también llamado coendú- es un roedor pequeño, de hasta 6 kilos. Posee púas tricolor, que pueden alcanzar los 6 cm de largo en la parte dorsal, las cuales utilizan como defensa ante ataques. Con una larga cola y garras curvadas, se desplazan por los árboles con facilidad. Prefieren moverse de noche, se alimentan de frutos, hojas y ramas verdes.
Barrios acudió al Instituto Municipal de Sanidad Animal (IMuSA) en cuanto pudo, para poder obtener atención para sus mascotas. En el lugar, la Directora de la Institución Dra Rosana Gacek y su equipo de profesionales atendieron a ambos animales, logrando extraer cada una de las púas. Este procedimiento demoró una hora y media aproximadamente, debido a que cada púa fue extraída manualmente, con sumo cuidado. Tras la intervención, Manuel y sus perros regresaron a su hogar, donde seguirán con los cuidados indicados por las médicas veterinarias.
Casi mil esterilizaciones por mes
El IMuSA, se encarga de brindar atención clínica y esterilizaciones gratuitas a los perros y gatos de la ciudad de Posadas. Hace unos días, compartió en las redes sociales las acciones que han realizado en el primer semestre del 2021:
- 13.350 desparasitaciones
- 9.029 aplicaciones de dosis de vacunas antirrábicas
- 7.873 atenciones clínicas
- 5.500 esterilizaciones
- 172 mascotas entregadas en adopción
Estas intervenciones se suman a las acciones de educación y concientización sobre la tenencia responsable de mascotas, sobre los cuidados preventivos –vacunas, higiene, castración-, y sobre el respeto y amor que se merecen los animales. Al respecto, la Dra Rosana Gacek en una nota anterior por Día del Animal, comentó que “Al momento de adoptar una mascota, uno se hace responsable durante toda la vida de ese animal, porque ellos dependen de nosotros. Por eso es importante antes de adoptarlo, asesorarse, porque nos tenemos que hacer cargo de las necesidades del animal”
Día a día, las personas se acercan a la Institución para controles clínicos, vacunaciones o para castraciones. Tal es el caso de Evangelina, quien acudió al turno de castración de su perra Pipi, y terminó adoptando otra, a quien nombró Pinky. Se trata de una perra adulta de tamaño pequeño, que se encontraba en las instalaciones del lugar, a la espera de ser adoptada. Un final feliz para esta familia, que, apostando a la tenencia responsable, esterilizó a Pipi, y le dio un nuevo hogar a Pinky.
Pinky, antes de ser adoptada, la llamaban Barbie 
Evangelina con Pinky en brazos, y su hija, con Pipi despertándose de la anestesia post cirugía
Otro caso similar es el de Esteban, quien vio una foto de Blanquita y se acercó a conocerla… el amor fue inmediato, la adoptó como el nuevo miembro de su familia.
También están perros como Tom, un perrito muy activo y juguetón a quien su dueña adoptó hace exactamente un año en el IMuSA. Tom asistió ejemplarmente a su vacunación antirrábica, cumpliendo con su ciclo de vacunas anuales. Este can, en palabras de su dueña, al principio era temeroso, pero ahora, tras mucho amor y cuidados, “es un loco, juega todo el día”.
Además, en el IMuSA se realizan castraciones diarias, en ambas sedes y en el quirófano móvil. Se programan los turnos de manera mensual, entregando un papel con todos los requisitos previos a la cirugía, y tras la misma, se entrega otro similar, pero con los cuidados post-quirúrgicos. En el caso de las castraciones, tenemos por ejemplo, a Sacha, una perra de 2 años mezcla de sharpei, que asistió a su turno de esterilización, junto a su compañero, Emilio, quien detalló “es la primera vez que vengo, me dieron el turno de castración para hoy, feliz porque es lo mejor que puedo hacer por ella”. Sacha, puntual, y alerta, esperó a ser llamada por los veterinarios.
Otros pequeñitos acuden para atención clínica, en donde realizan desparasitaciones, colocación de pipetas, entre otros.
Aquí, vemos al pequeño Chichu, un Shitzu de 50 días que acudió a su primera visita clínica.
Datos de interés
Para aplicación de vacunas antirrábicas, no es necesario solicitar turno previo. Acudir con el animal, y con DNI. Esta vacuna se realiza a perros y gatos a partir de los 3 meses, con revacunación anual.
Para atención clínica, no es necesario turno previo, la atención es por orden de llegada. Presentarse con DNI y con el animal, a partir de las 7 hs. o de las 13 hs.
Para castración, si se requiere turno previo. Los turnos se solicitan personalmente, con DNI. Para consultar la fecha correspondiente, comunicarse al 44-59012 (Base Zaiman) o al 44-68087 (Base 115)
