Dos pumas hembras escaparon del refugio Güirá Oga luego de que un hombre violentara las instalaciones del lugar. Los guardaparques lograron capturar a uno de los animales pero el otro ejemplar que tiene por nombre "Arana" aún sigue merodeando por la naturaleza.
En 2015, una joven científica realizaba sus trabajos de antropología en una zona alejada del mundo en Siberia oriental. Estudiaba una comunidad de pescadores y cazadores. Bajaba de la ladera de volcán y de repente se vio frente a un oso de 250 kilos. El animal dudó un poco y luego la atacó. Ella se defendió con un pico y se lo hundió en un costado del animal. Y eso la salvó. Esta es su historia.