La cadena internacional de streaming dio vía libra para que Marcos Carnevale y su guión. Una historia con tintes dramáticos: Padre abandona al hijo. Se vuelven a encontrar tres décadas después. Él ya tiene organizada su vida como guía en Iguazú. Y sí: el fondo de las magnificas cataratas da otro toque a la película
Boris tiene su vida organizada. Es un carismático guía turístico que trabaja en el Parque Nacional Iguazú. El lugar de indescriptible belleza que deja atónitos a los visitantes es su ámbito natural. Allí se mueve Boris. Recibir las delegaciones. Parlotear en castellano, inglés y algo de portuñol. Ver cómo la gente queda fascinada por esas grandes masas de agua que se caen mientras los vencejos se hunden en las cortinas de agua y aterrizan en las piedras de las paredes de vértigo. Pero Boris tiene un problema: hace mucho tiempo que no ve a su padre quien lo abandonó hace casi 30 años.
Y de repente, su progenitor (encarnado en Oscar Martínez) aparece. Ahí están los dos, al pie de un camión de esos tipo de las Fuerzas Armadas que se usan para trasladar turistas por la selva. A través de encuentros tensos y emotivos, ambos explorarán el dolor del pasado, el resentimiento y la posibilidad del perdón. Matías Mayer le pone el cuerpo al guía turístico que se encuentra con su padre.
El reencuentro no llega de manera planificada. Se trata de un cruce inesperado, cargado de tensión, resentimiento y emoción contenida. A través de distintas situaciones y diálogos potentes, los protagonistas se ven obligados a revisar el pasado, revivir antiguas heridas y preguntarse si todavía es posible una reconciliación.
Oscar Martínez, uno de los actores más prestigiosos del país, interpreta al padre ausente, un hombre marcado por errores y silencios. Por su parte, Matías Mayer, con una creciente carrera en cine y teatro, encarna a un hijo que no ha dejado de buscar respuestas, incluso cuando afirma que ya no las necesita.
No se trata de una producción menor. Es cine. Y está hecho con esas filigranas del trabajo artesanal combinado con la mejor tecnología del mundo y la seguridad de que podrá llegar a todo el mundo en un solo click en la pantalla.
Así, el paisaje misionero vuelve a conquistar la pantalla grande. Estos días finalizó el rodaje de El último gigante. Una nueva producción de Netflix dirigida por Marcos Carnevale, que eligió las Cataratas del Iguazú y otras locaciones de la provincia para contar una historia de reencuentros, dolor y perdón. La llegada del equipo técnico y artístico marcó un hito para la industria audiovisual local y fue acompañada de cerca por el Instituto de Artes Audiovisuales de Misiones (IAAviM), que apoyó en gestiones logísticas y celebró el impacto de esta apuesta privada.
El rodaje había comenzado el pasado 17 de mayo en Puerto Iguazú, en la provincia de Misiones. Los paisajes del Parque Nacional Iguazú y las majestuosas Cataratas del Iguazú serán parte del escenario visual de la película, ofreciendo un contraste impactante entre la belleza natural y el drama humano. Las primeras imágenes del rodaje fueron compartidas por Carnevale en sus redes sociales. En ellas se puede ver al equipo técnico y artístico trabajando entre vegetación exuberante y pasarelas que bordean los saltos de agua, confirmando el compromiso estético del film con lo autóctono y lo emocional.
Durante tres semanas, el norte misionero se transformó en un set de filmación. Con más de 100 personas trabajando entre técnicos, productores, actores y asistentes, El último gigante desplegó una logística que llamó la atención por su magnitud y profesionalismo. Cámaras, luces, lentes y camiones recorrieron la ciudad de Puerto Iguazú y los alrededores de las Cataratas, dejando ver el potencial de Misiones como locación cinematográfica de nivel internacional.
El último gigante es una producción de Leyenda Films y Kuarzo International Films. El elenco lo completan Inés Estévez, Luis Luque, Silvia Kutika, Yoyi Francella y Alexia Moyano.
En el marco del cierre del rodaje, Sergio Acosta y Santiago Carabante, presidente y gerente de Fomento del Instituto de Artes Audiovisuales de Misiones (IAAviM), se reunieron con Ignacio Rey y Rocío Gort, productores de Leyenda Films, y visitaron el set central de la producción. Durante el encuentro, Acosta transmitió el saludo del gobernador Hugo Passalacqua y agradeció a la productora por elegir Misiones como locación principal.
Luego del rodaje en Misiones, la producción continuará en Buenos Aires. Según adelantaron desde el equipo técnico, las escenas filmadas en las Cataratas del Iguazú lograron una potencia visual “como nunca antes se había visto en el cine argentino”.
Como autoridad audiovisual de la provincia, el IAAviM acompañó activamente el proyecto a través de su Comisión de Filmaciones. La institución colaboró con la gestión de permisos para cortes de rutas nacionales, avenidas y calles, y facilitó el acceso a espacios públicos en articulación con Corredores Viales, Gendarmería Nacional, la Policía de Misiones y otros organismos.
Sergio Acosta, presidente del IAAviM, fue uno de los testigos de ese despliegue. “Fuimos a visitar el set de la película y lo que más nos impresionó fue la cantidad de gente trabajando. Más de 100 personas, entre técnicos y actores, y también los camiones, la cantidad de equipamiento de cámaras, luces, lentes, equipamiento para hacer la película”, expresó. Destacando además el trato humano del equipo de producción de Netflix y de Leyenda Films, una de las productoras responsables.
Desde la gestión pública, es importante visibilizar la infraestructura creada para recibir a este tipo de producciones: conectividad aérea y terrestre, ubicaciones insuperables, hotelería y gastronomía, técnicos, actores y extras calificados, gestión de ubicaciones y la calidez de su gente.
