Los incendios forestales en la región, y otros puntos del país, nos dejan una evidencia muy clara, una verdad de perogrullo, NO EXISTE una POLÍTICA FORESTAL de ESTADO (siempre pendular) a nivel País, que tenga consonancia en las distintas jurisdicciones, por tanto estás situaciones lamentables de gran impacto ambiental, económico y social, se transforman en cuestiones o hechos repetitivos periódicamente, según la intensidad de las contingencia y condiciones climáticas, sin soluciones eficaces y estructurales.
Es clave, necesariamente clave, que tengamos una visión forestal estratégica regional.
Hay que salir de la discusión de los matices; de las “pujas políticas chiquitas”, de los lobbys, que no suma, no construye.
Necesitamos afianzar las bases de un futuro de desarrollo foresto-industrial sostenible a nivel regional, que tenga impacto fuerte en su microeconomía.
La supervivencia de los bosques es una real garantía para la humanidad, salvar lo que nos salva, es una obligación, no una opción.
“La gestión del territorio es el camino para tener bosques seguros”
“Más vale prevenir que curar”
La distribución de torres de vigilancia, tecnología de monitoreo apropiada para la alerta temprana, la disponibilidad de equipamientos y logística operativa para la intervención rápida y localizada, es esencial.
Los consorcios o cooperativas forestales de manejo del fuego, integrado por empresas y propietarios forestales son indispensable, con el acompañamiento y la adecuada articulación con el PPMF y PNMF según corresponda, para lo cual hay que capacitar recursos humanos en dichos consorcios y/o cooperativas.
Un bombero forestal se forma, hay que invertir más en la cabeza del bombero que en caso, sostiene el Ing. en Montes Español Marc Castellnou (Presidente de la Fundación Pau Costa), destacada autoridad mundial en materia de Incendios Forestales.
“Las imágenes satelitales son una herramienta, pero si el bombero no es un analista no hay capacidad de trabajar en eso. Ese concepto del bombero como un peón forestal está caduco. Hay que subir ese conocimiento y esa toma de decisiones”.
Hay que evitar la recurrente demanda y presión sobre los bomberos voluntarios, sólo a estrictamente necesario y ante situaciones muy puntuales, pues el loable trabajo de voluntariado que desarrollan debe focalizarse en otros tipo de fuegos y siniestros.
Los incendios forestales se combaten con planificación, con táctica y estrategia, requieren de brigadas especiales con alto niveles de capacitación y formación profesional, con equipamientos y logística específicos.
Los aviones hidrantes son una herramienta más del combate, pero no la principal (eso sí lleva tranquilidad social cuando están presentes).
Hay que estar PREPARADOS en serio para la temporada de incendios forestales y rurales, no se puede improvisar.
Alcanzar una adecuada articulación público privada en materia de incendios forestales es clave en la provincia y región, que funcione eficazmente en la temporada de incendios, tendiente principalmente a la cooperación y complementariedad en su accionar territorial, donde cada una de las partes asuma las responsabilidades y los compromisos que les correspondan.
Hay un gran desafío por delante y los profesionales de las ciencias forestales no pueden ser ajenos.
“Sólo es posible avanzar cuando se mira lejos. Sólo cabe Progresar cuando se piensa en grande” (José Ortega y Gasset)”.
Sequía prolongada
La sequía prolongada (vamos casi 3 años con un significativo déficit hídricos), baja humedad ambiente (menor al 30%), temperaturas extremas (Superiores a los 30°C) y viento por arriba de los 30 km es un combo potencialmente peligroso y sumado la poca conciencia de la gente (mucha negligencia o actitudes desaprensivas) se vuelve algo sumamente grave!
Necesitamos mucha prevención, intenso trabajo de Presupresión para evitar combatir fuegos forestales y rurales.
Algunos conceptos:
Prevención:
Es el conjunto de actividades dirigidas a reducir el peligro de incendios, que incluyen la educación pública, la legislación y el manejo de los combustibles, entre otras.
Presupresión:
Es el conjunto de actividades desarrolladas previo a la ocurrencia de incendios, con el objetivo de asegurar una más efectiva y eficiente supresión de los mismos. Incluye todas las actividades de planificación, desde el reclutamiento y entrenamiento del personal, la garantía de mantenimiento del equipamiento de combatientes, hasta el tratamiento de combustibles, creación y mantenimiento de sistemas corta combustibles, caminos, fuentes de agua, y líneas de control.
Combate de Incendios Forestales: son las acciones para extinguir al fuego, las ejecuta el personal con las herramientas y equipos necesarios. La forma, cómo y dónde extinguen al fuego dependerá de los métodos de combate a aplicar.
Escribe: Jaime Ledesma
Ingeniero Forestal y
Presidente del Colegio de Ingenieros Forestales de Misiones
Conversatorio internacional “INCENDIOS FORESTALES, su DIMENSIÓN GLOBAL y SUDAMERICANA”.
Ministerio de Ecología y RNR.
3 de marzo de 2022 a las 17 hs (Argentina)
Mercedes Bachfischer:
Investigadora de The Emergency Program. Incendio.
“Estado del arte en la investigación sobre mega incendios (incendios de sexta generación)”;
Matías Reyna:
Analista de la Federación de Bomberos Voluntarios de Córdoba.
“Repaso a los retos operativos del combate de incendios y lecciones aprendidas de los incendios en Patagonia”;
Felipe Borderas:
Instructor internacional de la Fundación Pau Costa.
“Visión global de la problemática de incendios, retos de prevención, formación y estandarización”
La Fundación Pau Costa conecta a una red de expertos a nivel global en materia Incendios Forestales. A su vez, crea conciencia en la sociedad, en general, incidiendo en la prevención de incendios forestales a través de la ecología del fuego.
Organizado por:
Instituto Forestal Provincial;
Colegio de Ingenieros Forestales de Misiones; y
Fundación Pau Costa
Auspiciado por
Facultad de Ciencias Forestales – UNaM.
