Un merendero que es llevado adelante por una voluntariosa vecina del barrio San Lorenzo de Posadas. Mónica Dutra es la encargada y recibe todo tipo de ayudas. Cuando no hay, sale a buscarlas porque siente que debe prestar este tipo de asistencia. Y para eso cuenta con importantes colaboraciones
Cumplir con las tareas diarias que demanda tener un trabajo fijo no es excusa para dejar de lado el trabajo solidario que nace del alma. Esa parece ser la consigna vital de Mónica Elena Dutra, en el Barrio San Lorenzo de Posadas, uno de los más humildes y donde las necesidades están a la vista.
“Me encanta la parte social y mi mayor satisfacción es poder ayudar porque muchas cosas me toca de cerca. La verdad yo creo que con esto se nace porque cuando no tengo para ayudarles golpeo puertas, y muchas veces me da impotencia por no tener más para brindar”
Hace siete años, Mónica Elena Dutra es propietaria del comedor y merendero que atiende en su casa ubicada en el barrio San Lorenzo de la ciudad de Posadas donde encontró la forma de sentirse “feliz” ayudando a los demás.
“Los días y horarios varían por mi trabajo, pero dentro de la semana siempre, lunes y miércoles merienda y viernes por la noche cena. La merienda a partir de las 16:30 y la cena a partir de 19:00” destacó.
Asimismo comentó que “por suerte los chicos vienen felices a buscar su merienda o cena. La mayoría de los chicos viven en el barrio y otros vienen de los barrios más cercanos”.
Para hacer el bien no hace falta tener muchas cosas materiales. Siempre se comienza a partir de la voluntad de ayudar a aquellos que lo necesitan. En este caso, abriendo puertas y recibiendo a niños que con una taza de chocolatada y facturas su mundo se vuelve más de contento.
En este sentido, Mónica destacó: “Yo trabajé mucho y lo sigo haciendo en la parte social y fui viendo las necesidades en los barrios, en las familias y qué hay mucho para hacer. Que tenemos que aprender que cuando nosotros muchas veces no queremos comer o elegimos para comer, otros no lo tienen y cuanto darían por tener”.
Así también, hizo hincapié en las personas que siempre ayudan. “Conmigo siempre colaboran las mamis y un papá que siempre está poniendo el hombro. También mis hijos cuando tienen tiempo ya que son todos grandes.”
Y siempre resaltando su cariño y amor en la tarea que realiza. “Me encanta todo lo que hago; no tengo lujos pero tengo unas ganas tremendas de ayudar y que a ningún chico le falte las comidas diarias, los abrigos, calzados. Mientras Dios me dé salud seguiré adelante, ayudando y colaborando”.
El merendero recibe colaboraciones del equipo del Vicepresidente del Iplyc Mario Gabriel “Marito” Alcaraz quien los visita con frecuencia para acercarle donaciones tanto del sector público como del privado. “Vinimos a compartir con los vecinos una rica chocolatada y pan de leche”, había posteado quien fuera DJ y concejal tiempo atrás, y hoy se halla en el IPLYC pero sobre todo haciendo una tarea puertas afuera, cuando visita barrios de Posadas y del interior. El contacto con la gente es vital para Marito.
Todo es bienvenido
Mónica Dutra contó cuáles son los insumos que están necesitando y que tienen que ver con el tiempo invernal que se avecina: “abrigos, calzados, clases de apoyo, y muchas veces contención.” Siempre es bienvenido cualquier ayuda que uno desea realizar, aportando desde el corazón a la gente que realmente necesita.
“Amo todo lo que hago, porque tengo mi trabajo que debo cumplir horarios pero siempre estoy con mis vecinos del barrio. Es más soy la presidenta del barrio San Lorenzo, muchos compromisos que tengo pero feliz siempre”.
