El Presidente tiene previsto reunirse con los mandatarios provinciales. Quiere sondear qué pueden apoyar. Por lo pronto, ya dio la quita de 15% de retenciones para economías regionales (en Misiones, yerba y té). Lo que no tenga consenso en esa reunión irá al Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU). Ese proyecto ya tiene 300 páginas. Las provincias del Norte Grande pueden perder casi $300 mil millones.
El presidente Javier Milei tiene previsto reunirse el martes 19 con los gobernadores para conocer cuánto consenso tiene con sus iniciativas. Si obtiene el apoyo en alguna cuestión, ese tema irá al súperpaquete de leyes que se tratará en el Congreso (los gobernadores pueden influir en los senadores, aunque esto no siempre es así). Si la negociación no prospera, los temas no consensuados formarán parte del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que emitirá el Poder Ejecutivo. Para tratar de distender el encuentro, el PEN recurrió a una maniobra del tipo “te quito y luego te devuelvo”. Días pasados el ministro Luis Caputo anunció un dólar exportación a 800 pesos (frente al de 365 pesos que regía) pero con una vuelta a las retenciones (impuesto a las exportaciones) de 15%. Aunque la ecuación parecía favorecer a los que producen para el mercado externo, hubo quejas y reclamos. Antes de la reunión con gobernadores, el gobierno nacional decidió retroceder con el famoso 15%.
Es entendible: los exportadores de mercados regionales (como el té o la yerba) apenas mueven la aguja del comercio exterior argentino. Aplicar una quita sobre ventas de té que pueden representar entre 70 y 100 millones de dólares es “plata de chipera”, dirían en Misiones (o sea, una cifra de bajo monto) que sólo implicará alto enojo de los exportadores. En cambio, decidido a buscar dólares frescos para equilibrar la balanza de pagos, eliminar el déficit fiscal y lograr bajar la inflación -todo en una- el Gobierno nacional decidió mantener la friolera del 30% de retenciones para la soja.
Será la primera vez que Milei se vea cara a cara con los gobernadores, a los que tampoco recibió de manera individual como presidente electo.
Los gobernadores, algunos de los cuales ya empezaron a anunciar políticas de ajuste en los distritos que gobiernan, están preocupados por la reversión de la reforma de Ganancias. Aún cuando varios de ellos se pronunciaron en contra, otros -los peronistas- estuvieron a favor de que 2 millones de personas dejen de pagar ese impuesto en el marco de la campaña presidencial de Sergio Massa. El propio Milei como diputado votó su aprobación. Y ahora lo rechaza.
Por lo pronto, los gobernadores pusieron la lupa en algunos ítems fundamentales para las arcas provinciales.
En ese marco, en el grupo del Norte Grande ya realizan sus propias proyecciones sobre cómo impactarán los anuncios.
La estratégica región, que nuclea a las diez provincias del NEA y el NOA, es vista como uno de los motores de la economía argentina en el futuro en especial por algunos commodities vitales para el país y el mundo: El litio, la minería y la energía son algunos de los recursos que la convierten en un polo de desarrollo esencial para la adquisición de divisas.
¿Quiénes gobiernan en el Norte Grande?
Actualmente los tres gobernadores de Juntos por el Cambio (JxC) en el Norte Grande son Carlos Sadir (Jujuy); Gustavo Valdés (Corrientes) y Leandro Zdero (Chaco).
El peronismo, en tanto, cuenta con Osvaldo Jaldo (Tucumán); Ricardo Quintela (La Rioja); Raúl Jalil (Catamarca); Gerardo Zamora (Santiago del Estero); Gustavo Sáenz (Salta) y Gildo Insfrán (Formosa). Hugo Passalacqua, del provincialista Frente Renovador de la Concordia, gobierna Misiones.
¿Cuánto puede llegar a perder el grupo de diez provincias a partir de 2024?
Según un informe elaborado por NorteGrande.com, entre enero y noviembre de 2023, las transferencias al Norte Grande consolidado fueron por $ 406.687 millones. Al respecto el documento advierte que, de ese total, apenas el 28% podría garantizarse para el 2024, mientras que el 72% de los mismos podrían ser eliminados.
A valores de noviembre de este año, se trata de unos $292.815 millones en la región. Del total de esos recursos, el 25% corresponde a fondos educativos entre los que se destaca el Fondo Nacional de Incentivo Docente (Fonid). ¿Podrá Caputo manotear ese dinero que va al bolsillo de cada docente argentino? Cerca de 100 mil millones de pesos (en 2023) tuvieron como destino el Fonid. Caputo quiere quedarse con el dinero del Fonid. Los observadores lo ven difícil porque se trata de una ley que está vigente (proveniente de a la sazón Carpas Blancas realizadas con Carlos Menem en los años 90).
Otro tercio de esos 406 mil millones (unos 135 mil millones de pesos) tenía su origen en organismos internacionales de crédito para obra pública en las administraciones provinciales. El dinero llega, va a las provincias, el gobierno nacional actúa como garante del crédito y luego si la administración provincial no paga o se retrasa, se lo va descontando de la coparticipación. Este 33% tiene destino de no continuación.
Y finalmente 1/5 (20%) aproximadamente se constituye en los famosos (y ahora repudiados) ATN o Asistencia del Tesoro Nacional. Se trata de fondos frescos para las administraciones provinciales vía Asistencia Financiera con Aportes del Tesoro Nacional (ATN). Allí es donde muchas veces -manejado por el ministro del Interior o el propio Presidente- se pueden realizar transferencias discrecionales a las gobernaciones, muchas veces sin necesidad de rendición de cuentas. El ahorro en este caso (bajo el grito “No hay plata”) sería a pesos de fines de 2023 de unos 80 mil millones de pesos.
Esto es lo que intenta quitar el PEN. Habrá que ver qué ofrece.
El ministro de Economía, Luis Caputo, no está dispuesto a aceptar la propuesta de los gobernadores para que se coparticipe el impuesto al cheque, como un modo de suplir las pérdidas que las provincias tuvieron por la modificación de Ganancias. Por el contrario, el titular del Palacio de Hacienda pretende que los mandatarios pongan la cara para dar marcha atrás con esa medida, que fue acompañada por el propio Milei en el Congreso cuando era diputado.
Semana movidita
La semana previa a la Navidad será agitada para el Gobierno de Milei: el jefe de Estado convocó a los gobernadores para el martes 19 al mediodía en la Casa Rosada; y el miércoles enfrentará su primera prueba en las calles con la movilización prevista por grupos piqueteros, que implicará la primera aplicación en la práctica del protocolo para evitar cortes, anunciado esta semana por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
Son dos jornadas sensibles para los argentinos: el 19 y 20 de diciembre se cumplen 22 años de la represión ejercida por la gestión de Fernando de la Rúa en 2001 que dejó 38 muertos y finalmente culminó con la caída de su Gobierno.
En la previa del viernes 15 de diciembre el ministro del Interior Guillermo Francos hizo tanteo para ver cómo está la actitud y qué pueden llevar los mandatarios como pedidos a su reunión con Milei. Fue un mix de gobernadores presentes y otros en forma virtual.
Asistieron al Salón de los Escudos de Casa Rosada los gobernadores de Santa Fe, Maximiliano Pullaro; de Chaco, Leandro Zdero; de Corrientes, Gustavo Valdés; y de Mendoza, Alfredo Cornejo; acompañados por el secretario de Interior, Lisandro Catalán.
Por videoconferencia lo hicieron Axel Kicillof (Buenos Aires), Raúl Jalil (La Rioja), Gustavo Sáenz (Salta), Marcelo Orrego (San Juan), Gustavo Melella (Tierra del Fuego), Claudio Poggi (San Luis), Claudio Vidal (Santa Cruz) y Gerardo Zamora (Santiago del Estero).
También lo hicieron Hugo Passalacqua (Misiones), Alberto Weretilneck (Río Negro), Rolando Figueroa (Neuquén), Ricardo Quintela (La Rioja), Martín Llaryora (Córdoba), Carlos Sadir (Jujuy), Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Gustavo Menna (vicegobernador de Chubut), Eber Solís (vicegobernador de Formosa) y José Vanini (secretario general de Gobierno de La Pampa).
